¿Qué haces cuando necesitas un abrazo? Sacas el celular y buscas en tu directorio nombres y números de personas que encuentras cercanas. Personas a las que sabes que puedes decirles lo que sea o personas a las que no les puedes decir todo pero sabes que aún así te darán el abrazo que tanto esperas. ¿Pero que haces cuando necesitas un abrazo y vives muy lejos de aquellos que pueden dártelo, por lo menos dártelo sin pedir nada a cambio, porque eso aunque suena trillado, es cierto. Hay personas que si esperan algo a cambio. Yo no. Yo no espero nada. No quiero nada de nadie que no venga muy honestamente. Prefiero sentirme mal querido, o no querido, a tener abrazos fingidos. Y mi madre o mi padre me contestarán y dirán que ellos me abrazan siempre y yo contestaré que no necesito que me lo digan, lo sé, se que me abrazan y me quieren, pero a veces uno busca un amor diferente, diferente incluso al de una pareja, busca el cariño y el amor de un amigo, de esos que desde hace algunos años dejé tan lejos y que no dudarían en abrazarme o por lo menos eso creo, un segundo. ¿Y qué si hago público mi sentir? Nadie lee. No es tan interesante, lo sé.
Cuán aturdidos estamos de todo. Cuan aturdidos estamos de personas, de trabajo, de sentimientos, de pensamientos. Como extraño y añoro aquellos días de San Pedro en los que compras carne, unas cheves y comes y pisteas sin esperar ni preguntar nada, donde el atardecer es el protagonista. No hay más, solo aquellos que están, el atardecer, las risas y la cerveza, siempre la cerveza, en sonora siempre la cerveza.
¿Y que tendrá que ver esto con Clown para llevar? Todo y nada. Todo por que es su servilleta quién escribe y nada, por que sí, nada.
En fin, todo esto es un pensamiento en voz alta o letras negras, como les guste más. No estoy mal, pero hace falta que algo suceda, no un avión en reforma o una guardería incendiada, eso es lastimoso y pasa todos los días en este país, ¡pero ya!, quiero que algo pase aquí, en mí. No afuera, no me importan las noticias aunque las veo diario, quiero que algo pase aquí, conmigo, no sé qué, pero algo tendrá que pasar. Camino confiado en que algo pasará, no me sentaré a esperar, soy un convencido de que cuando uno lo provoca las cosas pasan, así que seguiré en la provocación sin esperar que nada suceda. Llegará, una tarde lluviosa y contaminada en esta ciudad, algo pasará.
Saludo a los hermanos Pleyadianos
Hace 7 años
1 comentario:
pasará! ya pasará!
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